A las movilizaciones del día 11 de octubre se unieron entre 175 y 200 camiones, lo que provocaron retenciones de hasta ocho kilómetros en la autopista A-7, a su paso por Tarragona.
La junta directiva de Feat (Federación Empresarial de Auto Transporte) ha valorado como «muy positivas» las distintas marchas, especialmente por su grado de seguimiento. «Hacía mucho tiempo que una protesta sectorial del transporte no tenía tanta participación, pues fueron centenares de vehículos que se unieron a las tres caravanas, tanto en Tarragona, como en tierras de l’Ebre y el Penedès» explica José Luis Aymat, secretario general de la asociación de transporte de Tarragona.
El 31 de octubre, a las 17 horas, se volverán a hacer marchas lentas y cortes de carretera en la A-7 en tres zonas: Tarragona, Tierras del Ebro y Bellvei
La protesta, que fue una iniciativa de Feat, fue secundada por otras organizaciones en Cataluña y fuera de ella. Así pues, se realizaron el mismo día y a la misma hora, marchas lentas en Lérida, Gerona y Barcelona, organizadas y apoyadas por organizaciones representantivas en sus respectivos territorios. Otras organizaciones, como las de Alicante y Murcia, dieron un apoyo explícito a la movilización, informando a sus socios y recomendando a los vehículos que estuvieran en tránsito que se unieran a las marchas.
«El éxito alcanzado nos obliga a ser exigentes, en aras de conseguir soluciones para los problemas de todo tipo que ha comportado la aplicación de las medidas de restricción. Al sobrecoste por el pago de unos peajes insuficientemente bonificados, se suma la realización de muchos kilómetros innecesarios para la realización de los servicios, insuficiencia de áreas de descanso y restauración, etc. Todos estos problemas hay que resolverlos con una negociación real con la Administración» señala José Luis Aymat.